5 razones por las que a menudo te puede faltar el dinero
El dinero a pesar de los muchos beneficios que nos trae, siempre parece ser uno de los problemas más recurrentes en la vida de las personas. Y si estás leyendo esto, es muy seguro que en una o más ocasiones, hayas experimentado la falta del mismo para hacer o comprar lo que necesitas. Ya sea desde alimentos hasta un mero gusto, como los zapatos que alguna vez quisiste o esa salida a la que faltaste. Esto es algo que, quieras o no, influye mucho en tu estilo de vida y en tu autoestima. Y no, no se trata de materialismo. Se trata de aceptar que la riqueza es un aspecto indispensable para ser plenos y felices, sin que por ello se convierta en nuestro todo. Esto no tiene nada de malo.
Para empezar a ser alguien próspero, tienes que actuar de acuerdo a como lo hacen las personas que viven en la abundancia. Tus actitudes tienen más poder de lo que te imaginas, al momento de tener todo lo que quieres y ser quien realmente quieres. A continuación, vas a leer las 5 razones por las que a menudo te puede faltar el dinero.
1. No es fácil tener dinero
Esto es algo que todos nos acostumbramos a pensar desde pequeños. Hay que trabajar muy duro para ganar bien y hacer sacrificios constantes. Estos pueden ir desde ser esclavo del trabajo hasta empeñar alguna pertenencia, o endeudarte con préstamos. El dinero no viene así como así y hay que cuidarlo al máximo. Es este paradigma lleno de dificultades, el que en primer lugar te impide tener tantos ingresos como quisieras. Para ser tan próspero como deseas, primero tendrías que aprender a dejar de darle tanta importancia a la riqueza, como para que se convierta en una obsesión de tu vida. Es solo dinero que viene y que va. Créeme, puedes tener el que necesitas y un extra sin necesidad de esforzarte tanto.
2. El dinero te vuelve mala persona
A pesar de que parezca absurdo, si te pones a pensar, muchos medios de comunicación y elementos culturales nos han transmitido esta idea. Basta con recordar muchas películas y cuentos, en donde la gente pobre es retratada como noble, modesta y trabajadora, mientras que los ricos son personas egoístas y avaras. Ciertas enseñanzas religiosas también reflejan esta idea. Es increíble como hoy en día, el concepto de que «la pobreza nos vuelve mejores y más humildes personas», sigue cobrando la suficiente relevancia como para impedir que haya tantos individuos, que disfruten de una vida acomodada sin por ello tener que ser vistos como arrogantes o materialistas. El dinero no tiene nada que ver con los sentimientos o la personalidad de alguien.
3. Necesitas dinero para producir más ingresos
Si bien es más fácil incrementar tus ganancias cuando cuentas con un capital, ello no significa que sea imposible empezar teniendo nada. Te reitero que el dinero, solo tiene la importancia que tú le quieres dar. Si decides creer más en tu talento y tus capacidades para generar cuanta riqueza quieras, entonces habrás dado un paso muy importante, porque aprenderás que no dependes de nada más que de ti para ser abundante. Esta es la clase de pensamiento que distingue a quienes se hicieron ricos a base de su esfuerzo, de quienes se quejan todo el tiempo diciendo que su salario no les alcanza para nada o ni siquiera hacen el intento de cambiar su forma de actuar o de pensar. Hay que tenerlo en cuenta.
4. Debes trabajar hasta el cansancio para tener dinero
No necesariamente. Esforzarse es muy bueno al principio, pero hay que saber distinguir entre el trabajo inteligente y el trabajo que no lo es. Es inteligente ahorrar tu capital e invertirlo en alternativas que te generen ingresos constantes, sin necesidad de que tengas que sacrificar tu tiempo. El establecimiento de un negocio, la compra de propiedades o de acciones, son ejemplos de ello. Lo que no es inteligente, es desgastarte día a día repitiendo la misma rutina, que quizá te este dejando dinero, pero que de nada te sirve sino te brinda al suficiente tiempo libre como para disfrutar de tus ganancias. Después de todo, ¿de qué te sirve tener tanto si en vez de hacerte feliz, te está dando más frustraciones de las que pensabas?
5. Si no tienes dinero, no serás feliz
Ya hemos aclarado que ser rico no es sinónimo de algo negativo y que ciertamente, forma parte de las cosas que te facilitarán sentirte más pleno y contento, tanto contigo mismo como con lo que tienes, No obstante, esto no debe confundirse con el hecho de los recursos económicos se conviertan en el eje de tu vida. Como ya he señalado, esos vienen y van, y son solo una vía para llegar a lo que deseas. No es bueno obsesionarse con tener riqueza, especialmente si no la puedes compartir. Tienes que equilibrar este elemento con otros aspectos igual de importantes, como la salud, las relaciones personales, la superación laboral y profesional… todo forma parte de un plan en el que debes basarte, para conseguir tus objetivos.
Como ya has podido ver, las cosas son mucho más sencillas de lo que parecen ser. Una vez que te hayas hecho a la idea, de que laz razones anteriores te pueden estar limitando, sabrás encaminar tus pensamientos hacia una dirección más positiva. Esto no se trata de ningún misterio o fórmula mágica para vivir en prosperidad. Es pura y llanamente la verdad.