Aprender a lidiar con las preocupaciones
Es indudable que a lo largo de la vida, todos tendremos que lidiar con cosas que nos preocupan, pues lamentablemete los inconvenientes no dejarán de surgir. Pero llevar todas estas angustias más allá de lo que es soportale, parece haberse vuelto algo muy común entre las personas que se preguntan una y otra vez, porque no pueden ser felices. ¿Te ha sucedido esto alguna vez? Si es así, deberías considerar un cambio radical en tu manera de comportarte ante los problemas, para empezar a vivir plenamente.
Aprender a hacerle frente a nuestras preocupaciones puede ser una tarea complicada, pero que siempre se puede llevar a cabo cuando se consideran tres pasos importantes:
- Poner las cosas en perspectiva. A veces un problema no es tan grande como parece. ¿Tienes la seguridad de que vale la pena darle demasiado importancia? ¿De verdad es tan difícil de solucionar o representa una seria amenaza para ti? Recuerda que eres más valiente de lo que piensas y probablemente, no haya un motivo verdadero como para alarmarte demasiado.
- Pensar en una solución con la cabeza fría. De nada sirve que te pongas a buscar una manera de remediarlo, si antes estás demasiado desesperado o enojado. Puedes hacer algo de lo que te arrepientas más tarde. Relájate, considera todas tus opciones y al final del día, verás que nada es tan terrible como te lo habías imaginado.
- Acepta que no tienes el control sobretodo. Cuando una situación se ha vuelto irremediable, no queda más opción que aceptar las cosas como vengan y aprender a seguir adelante. Es muy duro, pero quienes se aferran a algo que no pueden cambiar, tristemente no podrán ser felices nunca. ¿Quieres esi para ti?
Aprende a darle tiempo al tiempo y trata de estar tranquilo y en paz contigo mismo. Las preocupaciones solo tienen poder sobre ti, si tú mismo se los das.