Como ganarte el respeto de los demás

El respeto es algo que toda persona quisiera tener; sin embargo, los problemas surgen cuando alguien no es capaz de conseguirlo por su mismo. ¿Por qué hay quienes encuentran tan difícil hacerse valer por los demás? ¿De verdad será tan complicado crearse una imagen respetable? Ciertamente la actitud con la cual se tomen las cosas, es algo que influye enormemente a la hora de reflejar seguridad ante los demás. No obstante si esto es algo que resulta difícil para ti, entonces tal vez quieras tomar en cuenta los consejos de los que voy a hablarte el día de hoy.

Obtener respeto es algo que no debería representar un obstáculo para nadie, porque ciertamente todos lo merecemos. ¿Tú crees de verdad que mereces ser tratado con decencia por la gente que te rodea? Si es así, entonces no debes tener ninguna duda. Frecuentemente quienes tienen conflictos y dudas consigo mismos, son los que a menudo necesitan más ayuda para hacerse valer por los demás. Y es aquí cuando entra en juego el primer aspecto que debes tener en consideración.

Si tú mismo no te respetas, nadie más lo va a hacer por ti

Tener poca estima por ti mismo es lo peor que puedes hacer, porque no estarás reflejando más que el miedo que absolutamente todos tememos y rechazamos. Es algo inconsciente y muy sencillo. Las personas tienden a hacer a un lado todo aquello que les recuerde lo que no quieren ser. Es por ello que constantemente buscan estar cerca de quienes tienen éxito y confianza; y ven como menos a quienes solo denotan autocompasión. Es muy duro decirlo, pero así funciona la cosa.

No puedes esperar que los demás te respeten, si tú mismo te has puesto en una escala muy baja. Comenzar por aceptarte y quererte, es lo más aconsejable si aspiras a que alguien más lo haga.

Trata a la gente como te gustaría que te traten a ti

Mirar a los demás de una manera igualitaria es primordial, tanto si buscas mantenerte alejado de conflictos como si aspiras a ser alguien de confianza y con quien se pueda pasar un rato agradable. Esta claro que para recibir primero hay que dar algo; aunque a veces el cáracter puede jugarnos algo en contra.

Si tienes problemas a la hora de moderarte en tus opiniones o tienes una personalidad más fuerte de lo normal, nunca está de más recordar que no todos piensan como tú y que en ocasiones, lo mejor es moderar las palabras o acciones, antes de correr el riesgo de perder el respeto en una relación.

Hazte valer como persona

No es necesario que tengas un comportamiento agresivo, ni que pases por encima de los demás; pero si debes ser muy firme en tus decisiones y convicciones, siempre y cuando no interfieran con la vida de alguien más. Saber decir no de vez en cuando tampoco es malo. No estar de acuerdo con alguien no significa necesariamente que le vas a llevar la contraria; sino que simplemente no te vas a dejar influenciar. Toda persona que se respete sabe como hacer valer sus opiniones.

No olvides que es muy importante que no te dejes dominar por los demás. Habrá quienes se sientan amenazados por tu firmeza y compensen ese temor, con una reacción negativa. Lo que tú tienes que hacer ante esto, es reafirmar tu postura sin perder la educación. Si aún después de eso, la persona en cuestión se pone alterada, quien terminará quedando mal es ella.

Toma en consideración tanto tus sentimientos como los de los demás

Cuando hablamos de respeto, tenemos que comprender que ambas partes tienen su propia manera de sentirse. Tal vez tú creas en un momento determinado, que tan solo tus sentimientos deberían ser tomados en cuenta sin importar como puedas lastimar u ofender a alguien de tu entorno. A pesar de todo a veces no es malo ceder, sobretodo si se trata de un asunto en el que bien puedes ayudar o poner de tu parte.

Pero no te dejes llevar por las circunstancias, porque también van a presentarse ocasiones en las que tengas que anteponerte a ti mismo. ¿Sientes que debes tomar una decisión que te hará feliz, a pesar de que los demás te dicen lo contrario? ¿Algo con lo que tu familia aspira para ti, te hace sentir incómodo? Entonces tienes que olvidarte de ellos y comenzar a pensar en tu persona, por más trabajo que te cueste. Porque como ves, hay muchas cosas que pueden cambiar dependiendo de como las llegues a ver.

El respeto no es un privilegio, sino algo en lo que debes trabajar día a día

El peor error de una gran cantidad de personas es ver al respeto como una especie de suerte o privilegio. ¿Desde cuanto es así? Si este es un valor del que todos necesitamos y cuando empieces a verlo como tu derecho, y no como un regalo excepcional, será cuando de verdad estés en condiciones de tenerlo para ti.

De igual forma recuérdalo cuando tengas que relacionarte con los demás. Todos buscan ser respetados, sin importar la fachada o personalidad que muestren ante el mundo. Pon en práctica desde hoy todos los consejos anteriores y te darás cuenta de que es más sencillo llevarte mejor con quienes te rodean, incluso cuando te topes con quienes tengan un cáracter difícil.

Después de todo, el respeto no es tan difícil de llevar a cabo.