Consejos para marcar un liderazgo que trasciende
El liderazgo siempre se ha considerado una característica importante para saber influenciar a los demás y alcanzar las metas que nos proponemos. Muchas personas dicen que ser líder es algo con lo que se nace y que no se puede aprender. No obstante, si hay algo de lo que tienes que estar seguro en la vida es que tú puedes lograr todo aquello que te propongas. Y si convertirte en un buen dirigente es lo que te has propuesto, entonces debes entender que esto es algo que sí es posible que aprendas, en tanto pongas todo tu empeño en ello. El día de hoy compartiré contigo algunos consejos para ayudarte.
Para ser líder empieza a pensar como uno
Las personas que toman el mando pueden permitirse tener ciertas dudas, pero nunca tienen miedo de afrontar los riesgos de todos modos. En pocas palabras si quieres dirigir, tienes que comenzar a pensar como quien tomará las riendas de cualquier situación. Deja atrás las inquietudes como si serás capaz de hacerlo bien, si llegarás a tu objetivo o si no el camino será demasiado complicado. Simplemente lánzate a averiguarlo por ti mismo y no pierdas tu tiempo. El tiempo es valioso y no lo puedes malgastar.
No te dejes llevar tampoco por quienes no tengan la suficiente confianza en ti. Muchos líderes han tenido que enfrentarse con el descontento de muchas personas y al final, acabaron demostrando lo que valían. Si te dejas derrotar antes de empezar, entonces jamás podrás convertirte en la persona que quieres ser ni demostrar lo que vales.
Piensa en las necesidades de los demás antes que en las tuyas
Si hay algo que caracteriza a los buenos líderes, es su capacidad para no ser egoístas. Y esto quiere decir que siempre anteponen lo que necesitan las personas con quienes está colaborando, antes de pensar en lo que ellos quieren o necesitan. Para ser el jefe es necesario hacer ciertos sacrificios, aunque los demás no puedan percibirlo de esta manera. Esto aplica a cualquier ámbito en el que vayas a estar a la cabeza, ya sea en una empresa, un proyecto escolar, en el hogar o en tu comunidad. La principal razón de un líder excelente es procurar el bienestar de los demás y preocuparse porque tengan lo que les hace falta, porque de no ser así, las metas en común se pierden.
Cuando estés al frente de cualquier emprendimiento, preguntáte a ti mismo que es lo que puedes hacer para que las personas que están a tu cargo desarrollen todo su potencial y se sientan cómodas con el entorno.
No te dejes vencer ante el negativismo
Una de las cosas más difíciles a las que hay que enfrentarse cuando se es líder, es a las dudas y el pesimismo que pueden surgir en la gente a la que te toca dirigir. Así sea una sola persona la que haga surgir estos problemas, no se puede negar que son cosas que dan mucho trabajo y lo peor es que de hecho, siempre habrá alguien que se muestre negativo ante el futuro.
Pero lo importante es no enfocarte en las cosas malas o los problemas que te señalen, sino buscar una solución para ellos. Eso es lo que hace alguien responsable y con la capacidad de estar al mando. Puede que sientas cierta inseguridad si te das cuenta de que tienes que lidiar con una situación así, pero recuerda que si tú no lo permites, nadie tendrá el poder de quitarte tu optimismo. Y aunque haya más de uno que se muestre poco dispuesto a cooperar con tus ideas, tú no puedes bajar la cabeza. Tienes que seguir adelante tanto por ti como por ellos.
Actúa como mediador antes de impulsar la competencia
Algo muy importante que todo líder debe saber llevar a cabo, es el hecho de saber como puede reconciliar a las personas de su equipo que no se lleven bien entre sí, a fin de que no pongan en riesgo el trabajo de los demás. Es algo muy difícil y hay que decir, que no siempre se puede conseguir que ciertos individuos se pongan de acuerdo. Pero la clave aquí es hacer que ambas partes queden en buenos términos, aun si no se llegan a entender del todo.
La competencia desmedida no es algo bueno cuando se trata de gente que trabaja del mismo lado. El trabajo en equipo es mucho mejor para alcanzar metas en menos tiempo, en lugar de retrarsarlas. Si permites que haya conflictos innecesarios, no son solo tus sueños los que están en peligro, sino también los de otras personas que colaboran contigo. No dejes que los problemas de unos cuantos terminen por afectarlos a todos e ingeniatélas para hablar con ambas partes y buscar la manera más apropiada de hacer que se den una tregua.
Si logras hacer esto, habrás conseguido una hazaña muy importante que reforzará tu liderazgo.
Haz que cada miembro de tu equipo sea capaz de creer en sí mismo
Cuando estás a cargo no solo tienes la responsabilidad de confiar en ti mismo, sino de hacer que tu equipo se sienta seguro con sus capacidades. Una persona que se siente insegura jamás será capaz de alcanzar todo su potencial. Tú, como quiene está al mando, tienes que estar dispuesto a ayudar a quien lo necesite para que tenga más seguridad y pueda colaborar para una meta conjunta.
No debes olvidar que alguien que lidera puede llegar a quebrar la voluntad de quienes le siguen, pero también puede reconstruirla. Conviertéte en una buena persona y llega más rápido hacia tus objetivos, permitiendo que quienes te rodean sean fuertes e independientes. Resalta los talentos que tiene cada uno y no te olvides de reconocerles sus méritos, cuando hagan algo bien. Esto es muy importante para que se sientan a gusto con lo que hacen, sin la necesidad de que crean que te acercas a animarlos por lástima o las razones equivocadas.
Si fallas, no te dejes vencer
Es muy difícil afrontar nuestros propios errores y más si estamos dirigiendo una causa, y hay personas que confiaban en nosotros. Por qué cuando esto sucede, se entiende que uno debe asumir toda la responsabilidad y dar la cara por las cosas que salieron mal. Esto es muy complicado y tiene un mérito que casi nadie puede ver, cuando solo se pueden fijar en el fracaso. Sin embargo no es la primera vez que sucede y ciertamente no será la última.
Muchas personalidades han tenido que hacerle frente a esta situación. Sus empresas cayeron en bancarrota, sus proyectos no resultaron como esperaban o llegaron a cubrir todos los objetivos que se habían propuesto. Pero eso no significa que no continuarán intentándolo, aunque el mundo tuviera una visión muy distinta de ellos. Eso es lo que tú debes entender y debes quitarte el miedo a fallar, sabiendo que siempre puedes volver a levantarte. Habrá quienes dejen de creer en ti y te abandonarán, pero si tú sigues empeñandote en confiar en tu mismo, las cosas se solucionarán con el tiempo.
Espero que los consejos del día de hoy te hayan sido de gran utilidad para reforzar tus capacidades como líder. ¡No dejes de visitar Feliciteca!