El círculo de la generosidad
Son tantas las veces en las cuales nos preguntamos como podemos tener más abundancia en nuestras vidas, que solemos pasar desapercibido lo necesario que es aprender dar antes de recibir. Y es que aunque no lo creas, la generosidad es algo que si se brinda desinteresadamente, vuelve hacia ti de las formas más inesperadas pero agradables. No obstante, pareciera que hoy en día es muy difícil ser generosos con los demás.
Cuando se trata de dar, no es necesario pensar solo en el dinero o en las cosas materiales. Las personas a nuestro alrededor pueden tener muchas carencias, en las que casi nunca nos fijamos.
Necesitar de la compañía o de la ayuda de alguien, un hombro en el cual llorar o simplemente, apoyo moral para cualquier causa que valga la pena, son situaciones en las que siempre puedes empezar a ser más generoso con quienes te rodean y que te van a traer muchos amigos y cosas buenas. Porque cuando la gente comienza a darse cuenta de que siempre tienes la disposición de ayudar, difícilmente te darán la espalda. Y encaso de que haya quienes lo hagan, siempre encontrarás a más individuos que estarán determinados a ver lo mejor en ti.
La generosidad se mueve como un círculo, que todo el tiempo regresa a quienes han extendido su mano a alguien que lo necesitaba. En cambio si todo el tiempo pretendes que te apoyen sin dar nada a cambio, no deberías sorprenderte al no recibir todo lo que deseas en la vida.
¿Cuándo fue la última vez que te sentiste realmente feliz de ayudar a una o más personas? ¿Ver por ti mismo te ha llenado de satisfacciones o te ha vuelto más feliz? ¿Crees que si llegará el momento, tendrías a alguien en quien pudieras confiar ciegamente? Ser generoso puede darte una respuesta positiva, para cada una de estas preguntas.