¿Qué es el liderazgo transaccional?
En Feliciteca te hemos mostrado ya varios tipos de liderazgo, con las ventajas que proponen a la hora de marcar el éxito en tu vida y la manera en que los puedes aprovechar en tu vida cotidiana. Parece increíble pensar en que, incluso para algo tan simple como lo puede ser un líder, existe más de una forma en que este se puede comportar para ser un ejemplo, bueno o malo. Hoy quiero hablar contigo acerca del liderazgo transaccional, definiendo lo que es y como puede ser de ayuda en tu vida si quieres tomar las riendas de una situación.
¿Qué es el liderazgo transaccional?
Se le llama de esta forma al liderazgo que incluye la planificación de una meta y la motivación de las personas de las que está a cargo, para poder alcanzarla. Si algo hay que lo caracterice, es la manera que tiene de fijarse en los intereses personales de los miembros que forman parte de un equipo, para incluirlos en la medida de lo posible dentro de un proyecto y así, que todos puedan adquirir un mayor compromiso con el objetivo a lograr.
Puede ser uno de los más eficientes si se sabe como llevarlo a cabo de manera responsable.
Para ser un líder transaccional, hace falta una buena actitud capaz de influir en los demás y por supuesto, facilidad de palabra para mantener el ánimo de quienes te rodean. También una gran visión cuando se trata de ver estrategias a corto y largo plazo.
¿Cuáles son las características de un líder transaccional?
Una persona que se decante por este tipo de liderazgo, reúne ciertos aspectos que son muy útiles cuando está a cargo de una meta. En resumen, estas son las características con las que debe contar para hacer su trabajo eficientemente.
- Hacer uso de incentivos para motivar a sus empleados. Esto es muy importante, puesto que se les da una recompensa por la cual deben esforzarse en serio. Está puede adentrarse dentro de opciones muy variadas, como un bono o alguna especie de reconocimiento o ascenso. Con frecuencia, el incentivo es utilizado por cientos de empresas en la actualidad que mantienen a los trabajadores dando el 100%.
- Empleo de castigos como contraparte a la recompensa. Esto se refiere a que si bien hay una retribución por el trabajo bien hecho, las faltas dentro del trabajo también obtienen una acción para prevenirlas en el futuro. Si bien castigo es una palabra fuerte, este generalmente se refiere a medidas como una retención de los incentivos o la pérdida de un puesto en una compañía.
- Se enfocan más en el plan para alcanzar un objetivo, que en el entorno laboral. Para un líder transaccional lo más importante, es cumplir en tiempo y forma con las metas planteadas, que revisar el tipo de ambiente que existe entre sus empleados. Es por esto que le conceden más importancia a las acciones que llevan a cabo para cumplir con un proyecto, que a las relaciones que se presentan entre sí.
- Sabe como hablar con sus subordinados para infundirles motivación. El uso de las palabras es muy importante en este tipo de líder, pues debe saber como tiene que comunicarse con quienes están a su mando, para lograr que sean eficientes y que comprendan la importancia de comprometerse con su trabajo. Además, esto es de gran utilidad cuando se toman decisiones respecto a su productividad.
- Está consciente de que deben establecerse tratos entre el trabajador y empleador. Los tratos son la base de este tipo de liderazgo, ya que si las dos partes no obtienen una ganancia que sea equitativa, entonces no se puede esperar lograr lo deseado; en especial por parte de los empleados. El trabajo bien hecho tiene un costo y es necesario cubrirlo si se esperan los mejores resultados.
El objetivo más indispensable que tiene un líder transaccional es tener un sistema, que todos los trabajadores puedan seguir para laborar en las condiciones más óptimas. Su principal preocupación es que, tanto la empresa como ellos salgan ganando. Si alguna de las dos partes pierde o no se siente contenta con el rumbo que van llevando las cosas, algo estará fallando para él y será necesario meter más incentivos o planear nuevas estrategias, a fin de conseguir que la compañía pueda laborar como debe.
Ciertamente, este liderazgo no es tan contundente como otros, pero tiene su punto al buscar un trabajo bien hecho.
Ventajas y desventajas del liderazgo transaccional
Como suele ocurrir con todos los estilos de liderazgo, este también presente sus cosas buenas y sus inconvenientes. A continuación puedes leer las principales desventajas y ventajas con las que te puedes topar a la hora de ponerlo en practica.
Ventajas
- Las recompensas suelen tener efectos muy positivos en los trabajadores. No solo son buenas para motivarlos, sino que también son justas para premiar a los que destacan en lo que hacen y por su dedicación al efectuarlo.
- Es contundente si se tiene una meta. Una de las cosas más destacables del liderazgo transaccional, es que resalta por ser de los que no se detienen en asuntos aparte y llegan a cumplir más rápido con sus objetivos.
- Ayuda a identificar a los empleados más capaces. El hecho de que las personas pongan todo de sí para hacerse con un incentivo, puede ser un gran indicativo para detectar a aquellas que son más indispensables y talentosas en las tareas donde se desempeñan.
- Sabe como valorar el trabajo bien hecho. Pocos líderes tienen a reconocer lo importante que es que quienes están a su cargo, se sientan productivos y apreciados por las cosas que hacen, incluso más allá del agradecimiento, por medio de retribuciones económicas que sean justas.
- Se basa en un beneficio mutuo. A diferencia de lo que suele ocurrir en muchas empresas, la mayor parte de los beneficios no recaen en el empleador, sino que también en el empleado y con tratos que son mucho más equitativos.
Desventajas
- Limita mucho la innovación dentro del trabajo. Al estar tan enfocado en las metas y los premios, no hay mucho lugar a que los empleados disfrutan más del proceso o aporten ideas, que a largo o corto plazo, ayuden con el crecimiento de una empresa.
- Los castigos y premios pueden comportamientos negativos en los empleados. Sentimientos como la competitividad no sana y la insubordinación, podrían llegar a surgir con este sistema para obtener la colaboración de los empleados.
- Le da más importancia a corregir los errores que a prevenirlos. No siempre es bueno esperar a caer si esto se puede evitar con un poco de atención. En este caso, la necesidad de no perder tiempo puede resultar contraproducente cuando hablamos de fallos.
- No se puede contar con la lealtad de los empleados. Esto se debe a que la interacción con ellos, se limita simplemente al intercambio de beneficios. En cuanto este se termina, no es muy común que las personas se queden para apoyar al líder.
- No tiene tanto alcance como otras clases de liderazgo. Con esto se quiere decir que no llega a causar el impacto esperado en todas las personas que forman parte de una compañía y por lo tanto, esta se pierde de tener toda la eficacia con la que podría llegar a funcionar.